Colombia Renaciente redefine su liderazgo en Casanare luego de renuncia del Presidente.
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El partido Colombia Renaciente atraviesa un momento clave en Casanare. Durante una reunión reciente con directivos nacionales, se formalizó la salida de Wilmer Betancourt como presidente departamental, lo que abrió paso a un proceso de renovación interna.
Este cambio ocurre en medio de otro escenario político delicado: la posible pérdida de la curul del diputado Wilder Ávila, cuya credencial pende de un fallo del Tribunal Administrativo.
La posible incorporación de Mateo Tarquino, un estudiante de derecho que representa a una nueva generación dentro del partido, ha generado expectativas entre los militantes.
Sin embargo, también ha puesto sobre la mesa las críticas hacia la gestión de Ávila, quien, según algunos sectores de Colombia Renaciente, no ha cumplido con las expectativas de representación política creadas durante su campaña.
“Los votantes nos dieron su confianza, pero no hemos visto resultados”, señaló José Salvador Camilo, uno de los líderes locales más reconocidos del partido. Su declaración refleja un malestar que podría influir en las decisiones futuras de la colectividad, especialmente en un contexto donde la credibilidad y la capacidad de gestión son fundamentales para mantener el apoyo electoral.
