En menos de una semana dos jóvenes han fallecido realizando maniobras peligrosas
2 minutos de lectura
El reciente fallecimiento de un adolescente motociclista cerca al estadio Santiago de las Atalayas ha encendido las alarmas sobre un fenómeno preocupante: las restricciones nocturnas a motos están desplazando las conductas de riesgo a horas diurnas. Juan Sebastián Gómez Tafur, de 16 años, se convirtió en la víctima más reciente de esta problemática.
Aunque las medidas restrictivas han reducido notablemente los accidentes nocturnos, durante el día se observa con frecuencia grupos de jóvenes realizando maniobras peligrosas.
Muchos de ellos, como el fallecido, son menores de edad que conducen sin licencia y sin elementos de protección básicos.
Las autoridades enfrentan ahora el desafío de controlar estas nuevas dinámicas. El lugar del accidente, cercano al principal estadio de la ciudad, se ha convertido en punto de reunión para estos grupos.
El caso de Gómez Tafur representa un llamado de atención sobre la necesidad de reforzar los controles también en horario diurno.
La administración municipal se había comprometido con estos jóvenes para acondicionar un lugar seguro para que realizaran sus practicas sin afectar a la ciudadanía y con las debidas normas de seguridad, pero hasta ahora no se ha evidenciado ningún avance en este sentido.
Este hecho también es una oportunidad para la reflexión de los padres de familia que permiten que menores de edad conduzcan estos vehículos sin licencia de conducción, pero sobre todo, sin los equipos de seguridad para la práctica de este deporte.
